La continuada dependencia global de los combustibles fósiles es una amenaza tridimensional que afecta las esferas económica, ambiental y social. Recursos no renovables como el petróleo, el carbón y el gas natural son los principales responsables de un volumen significativo de las emisiones de gases de efecto invernadero, acelerando de forma crítica el proceso del cambio climático. (Fuente: Ambientum)